Lucerna - Museo de Bellas Artes de Bilbao

Comprar imagen

Lucerna

Anónimo. Siglo I

Bronce

2,8 x 9 x 3,39 cm

Siglo I

82/845

Donación de doña Mercedes Basabe, viuda de don Manuel Taramona, en 1943

Lámpara de aceite de cuerpo circular abierto, con anilla superior plana y piquera larga enmarcada por medias volutas. El asa, sobre la que se dispone una amplia hoja de encina de cuyo pedúnculo sale una bellota, es vertical y está situada en la parte trasera y rota en la zona infe

Entre las lucernas de bronce encontradas en España pueden mencionarse tres del mismo tipo de volutas en la unión del discus y el infundibulum, aunque ninguna de ellas tiene asa con decoración vegetal como la nuestra. Son los ejemplares del Museo Arqueológico Provincial de Badajoz (n.º inv. 11.659), del Museo Numantino de Soria (n.º inv. C 1.657) y del Museo Arqueológico Provincial de Granada (n.º inv. 199), esta última con el asa en forma de creciente lunar con remates de bolas. Es el tipo que formalmente debe situarse en la primera mitad del siglo I d. C.

Una similar, pero en peor estado de conservación, procede las excavaciones de Herculano, es ya del tipo piriforme, utilizado een la segunda mitad del siglo I d. C., pero tiene la misma decoración en el asa, aunque en su descripción sólo se identifica como una "hoja alargada con botón central". En nuestro ejemplar se reconoce con claridad la hoja de nervadura central y bordes ondulacaracterística de las quercíneas, y la pequeña belloque nace de la misma inserción que la hoja, lo que se corresponde mejor al alcornoque que a la encina, y sería menos adecuado para el roble u otras especies de fagáen las que el borde de la hoja suele ser festoneado.

Las quercíneas, esencialmente el roble, pero también otras variedades como la encina y el alcornoque, se utilien la Antigüedad para formar coronas ornamentaque se colocaban en los recintos sagrados o se trenen guirnaldas. Frente a las coronas de laurel, que son las adecuadas para los vencedores de los juegos olímpicos, las coronas de hojas de roble se dedicaban a las divinidades mayores, como Zeus, y en época romana se concedían a los gobernantes y a los militares victorioen sus entradas triunfales, de donde procede su aplicación a las llamadas "coronas cívicas". Si nuestra lucerna hubiera estado destinada a un uso ritual más que utilitario, para ser colocada en un altar o larario doméstico, lo que se aviene correctamente a su pequeño tamaño, podría decirse que su destino más apropiado sería el de iluminar una imagen de Zeus. (Ramón Corzo, 2011)

Bibliografía seleccionada

  • Corzo Sánchez, Ramón. "Bilboko Arte Ederren Museoko antxinako brontzeak : Taramona-Basabe bilduma = Bronces antiguos del Museo de Bellas Artes de Bilbao : la colección Taramona-Basabe = Antique bronze figures at The Bilbao Fine Arts Museum : Taramona-Basabe Collection", Addenda, n° 1. 2011. pp. 433-435, n° 88.