Colección online y Banco de imágenes

Además de escritor, Del Valle fue autor de una obra plástica de cierta importancia en la que, por encima de los óleos y las acuarelas, destacan sobre todo los collages, obras de filiación surrealista que, a menudo, se han relacionado con los que realizó el aragonés Alfonso Buñuel. Junto a éste, Del Valle está considerado uno de los grandes representantes del collage surrealista en España. Realizó sus primeras obras a finales de los años veinte o comienzos de los años treinta, y continuó creándolos hasta el final de sus días. "El proceso formativo del collage -escribió- es análogo al del gusano de seda en el interior de su cápsula maravillosa; hilar continuamente e hilar delgado. Son imprescindibles las siguientes dotes: imaginación, memoria, si bien memoria visual, sentido plástico de las cosas, y un gran lirismo que nos evada del mundo de las formas representables". Para componer los suyos, Adriano del Valle utilizaba imágenes recortadas de viejos grabados, catálogos y revistas dell siglo XIX que atesoraba en su bien surtida biblioteca. "Tres o cuatro mil piezas recortadas de litografías románticas constituyen mi archivo -escribió-, o mejor dicho, mi osario, puesto que representan la esqueletomaquia de mis libros". Además, reconoció: "para La Nature, L'Illustration y las ediciones de Julio Verne mis tijeras son como la polilla de la litografía".

Minuciosamente ejecutadas, en todas sus piezas predominan la sorpresa, el absurdo, lo desconcertante y lo inquietante. En la obra del Museo, cuyo título recoge la locución latina que hace referencia al delirio que provoca el síndrome de abstinencia del alcohol -delirium tremens-, Del Valle ha dispuesto sobre un espacio que vagamente recuerda a las vías de un ferrocarril, en el que la perspectiva tradicional ha sido abolida, una serie de elementos de tipo alucinatorio entre los que destacan insectos; ajenos a su amenaza, dos niños de corta edad duermen en la parte superior izquierda; a su derecha, como si gateara por una cuerda floja, un adulto parece tratar de escapar. Como ocurre en el resto de sus collages, hay en éste una más que evidente relación con los de Max Ernst. Su admiración por el artista alemán fue reconocida en su momento por el propio Del Valle, que en su biblioteca disponía de ejemplares de dos de las obras esenciales de Ernst, La femme 100 têtes (1929) y Rêve d'une petite fille qui voulut entrer au Carmel (1930). A semejanza de éste, llegó a proyectar un libro de collages, Sésamo, ábrete. (Miriam Alzuri, 2009)

Bibliografía seleccionada

• Últimas décadas del siglo XIX-primera mitad del siglo XX : de Cézanne a Léger : colección Museo de Bellas Artes de Bilbao [Cat. exp.]. Bilbao, Museo de Bellas Artes de Bilbao, 2009. pp. 264-267, n° cat. 108.
• Tagtraume Nachtgedanken : Phantasie aund Phantastik in Graphik und Photografie [Cat. exp.]. Nürnberg, Germanischen Nationalmuseums, 2012. pp. 184-185, 275, n° cat. 88.
• Surrealistas antes del surrealismo : la fantasía y lo fantástico en la estampa, el dibujo y la fotografía [Cat. exp.]. Madrid, Fundación Juan March, 2013. pp. 194, 298, n° cat. 96.
• Bilboko Museoaren alfabetoa = El alfabeto del Museo de Bilbao = The alphabet of the Bilbao Museum = L'alphabet du Musée de Bilbao [Cat. exp.]. Bilbao, Bilboko Arte Ederren Museoa-Museo de Bellas Artes de Bilbao, 2018. pp. 276, 281, n° cat. 159.